¡Qué oso! !Huy, me escondo!


jueves, 29 de mayo de 2008

El papelón de los Santos y la cúpula militar con Madrid. Madrid – Cundinamarca. Tendrán que aprender a manejar ‘Google Earth’.

ANNCOL

Los miembros del régimen narco-paramilitar de Álvaro Uribe Vélez ‘no dan pie con bola’. Meor dicho –como dice la ‘gomela’-, ¡qué oso!

Cada que intentan hacer algo –siempre truculento- les ‘sale el tiro por la culata’. Por un lado, el narco-paramilitar –en toda la acepción de la palabra- general Montoya quiso posar de inteligente y anunciar que ‘estaban pagando’ –y están pagando- ‘recompensa’ por la información de en dónde está el cadáver del Comandante en Jefe de las FARC-EP, Manuel Marulanda, y en seguida que ANNCOL los llamó lo que son: ¡Miserables!, pues les tocó salir a decir ‘que este que…’, ‘que si… pero no’…, etc, etc.

Y para terminar de ‘embarrarla’ –ya todo lo que tocan queda salpicado-, salen con el cuento del ‘atentado en Madrid’. ¡Qué risa! No he podido aguantarme esta risa que me da desde ayer al ver el enorme ‘oso’ que han hecho. ¡Qué funcionarios tan inteligentes! ¡Qué lumbreras! ¡Estoy gratamente sorprendido! ¡La comunidad internacional está estupefacta!

No saber que a lo que se refería Cano –si es cierta la información del ‘computador’, otro más-, era a Madrid – Cundinamarca y no a Madrid – España, ese si es el colmo de los colmos. Que no lo sepa Álvaro Uribe, vaya y vuelva. Pero que los Santicos Santos no lo sepan, ellos que son ‘rolos’, hombre! Y por aún –porque los inteligentes Santos se pueden excusar porque ellos son un tanto brutitos-, que los militares, la policía, no sepan en dónde queda Madrid – Cundinamarca, eso si es el ‘apague y vámonos’!

Porque que nosotros sepamos en ANNCOL, los militares y policías reciben en sus entrenamientos –para suboficiales, ‘enchufes’ y oficiales-, cursos de cartografía. Sí, cartografía, esa materia que le permite a uno con el mapa ubicarse en dónde está o en dónde queda una población, incluso para ubicar una dirección.

‘Con el dolor de mi alma’ me toca enseñarles a los oficiales de las fuerzas militares y de policía estatales, que en Internet pueden conseguir una página que se llama ‘Google Earth’, y en ella ponen el nombre: Madrid – Colombia, y enseguida el programa le muestra en dónde queda! Así de sencillo!

Y lo más triste es que esa caterva de imbéciles son los que están luchando para dirigir –y ya lo hacen- a Colombia. ¡Oh, pena inmarcesible!

DN