fredag 2 maj 2008 ·

¿Trabajo? En dónde, en dónde...




viernes, 02 de mayo de 2008


El Dane, esa monstruosa fábrica de mentiras, acaba de publicar que el empleo ha disminuído en Colombia.

Por ANNCOL

Según la cadena radial Caracol, más conocida como Paracol, “Al concluir el primer trimestre del año, la tasa nacional de desempleo en Colombia se redujo al 11,1 por ciento, informó el Departamento de Estadística.

…Un año atrás se encontraba en el doce por ciento, señaló el organismo. Al finalizar el primer trimestre de 2008, dos millones 337 mil colombianos no tenían trabajo.

…Según el Dane, en el último año el número de colombianos ocupados subió a 18 millones 788 mil, el equivalente a un 7,4 por ciento.

…En los últimos doce meses se crearon un millón 288 mil fuentes de empleo fundamentalmente en las grandes ciudades en donde opera la gran industria.

…El subempleo, que está asociado a la informalidad en el trabajo, también cayó. Del 33,4 por ciento en el promedio trimestral de hace un año al 29,8 por ciento. En ese escenario se defienden laboralmente seis millones 295 mil personas”.

Al leer la noticia mi corazón saltó alborozado y casi me da una arritmia. Ahora, sí, pensé. Ahora sí voy a trabajar y poder sostener a mis cuatro hijitos. Y emocionado empecé a buscar en dónde, en dónde están esos maravillosos trabajos. En dónde –canturreaba- está esa maravilla.

Busqué y busqué y nada. En Sofasa han despedido como 2.000 trabajadores, en Coltejer como 600. En todas partes han echado a la calle a los trabajadores. Y ya desesperado se me ocurrió preguntarle a un compadre ‘en dónde estaban esos nuevos empleos’. Su respuesta me dejó anonadado: “Vea compadre, no sea tan pendejo! No vé que siempre el Dane publica esas cosas pero son purísima mentira. El Dane es la fábrica de mentiras del régimen narco-paramilitar de Uribe Vélez, más ahora cuando están que se caen. Compadre, están que se caen, ca-en, entiende compadre?”

Ya después, sentado al borde de un pretil de un semáforo de la 7ª, en dónde me ‘rebusco’ vendiendo chocolatinas, seguía con la vista los carros y me pareció ver volando en el firmamento de mi Bogotá querida el millón 288 mil empleos… y de pronto oí la manifestación del 1o de Mayo: ‘Sólo el pueblo salva al pueblo” y otra que me gustó mucho: ‘el pueblo unido jamás será vencido’. Y corriendo me sumí a la marcha y comencé a corear: ‘Uribe, paraco!, el pueblo está berraco!’ ‘Uribe, paraco!, el pueblo está berraco!’ ¿Uribe, paraco!, el pueblo está berraco!’

DN

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